lunes, 9 de abril de 2012

Is it the lead?

Otro CEO más, y van 10 para mí, ha pasado. Este ha sido más bien un CEO para olvidar quitando el oro por relevos.
En la larga muchos fallos en las 3 primeras balizas (unos 11-12') y a partir de ahí, rodando hasta el final sin fallar mucho. 6ª posición.
El sábado llegó el relevo, donde teníamos grandes opciones de llevarnos el oro. Gran primera posta de Luis que me deja con una ventaja enorme sobre los segundos clasificados. Yo salgo segundo y el catalán casi me hace un: "ey Oscar, is it the lead?", pero reacciono con un hachazo y logro volver a abrir hueco y Manu, con una gran 3ª posta remata la victoria.
En el sprint, muy buenas sensaciones físicas pero demasiados fallos para una carrera tan cross... 5º.
Y la media no me apetece mucho comentarla, al final 8º.

También he notado en el CEO que ciertas normas de la orientación se están olvidando, así que me gustaría repasar alguna de ellas.

1- Prohibido hablar en la zona de salida. Vale que una pre-salida de 30 minutos no ayuda mucho a eso, pero al menos guardar silencio en los últimos minutos de la salida (descripción y mapas), y más si eres el juez controlador.
2- Prohibido hablar durante la carrera. Esta norma  se suele flexibilizar a "no preguntes a los élite ni a los que van rápido". Pero desde luego, que un élite, por muy paja que sea ahora, se dedique a joderte tu carrera diciendo gilipolleces sin venir a cuento está prohibido y más siendo un CEO y prueba de selección para el JWOC, ¿o tal vez fue por eso?
3- Las personas que no participan no pueden ayudar a los corredores a encontrar las balizas, bien sean de la organización, bien público, y esto incluye no ayudarles en las elecciones de ruta.

y 4º, y esto no es normativa pero moralmente me parece igual de importante, reservarse en un CEO si no es por lesión lo veo de lo más rastrero.

Por último, destacar en este CEO a la Patiño por sus 4 oros, al gran hachazo Nogueira por su Sprint, a Andreu por la larga y a Antoñiko, sobre todo por su carrera en la media, donde casi nadie confiaba en él.

Next stop, Burgos. A ver que nos preparas Edu.

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